En el mes de setiembre pasado, decidí iniciar una investigación personal sobre Registros Akhásicos y, más particularmente, ciertos interrogantes sobre la técnica de Apertura de los mismos. Cuando lancé esta propuesta, esperaba un eco masivo, toda vez que solamente la revista tiene 11.000 suscriptores reales y habida cuenta del gran número de facilitadores y practicantes de esta técnica que se deduce que existen. Grande fue mi sorpresa al recibir una muy pálida respuesta. Sólo doce personas respondieron. Supongo y acepto que para muchos, la Lectura de los Registros Akhásicos es una realidad incontrastrable y cualquier intento de verificación, investigación (y por ende, potencial crítica) carece del menor interés.. Dejo de lado, aquí, cierto número de ofrecimientos de venta de talleres. Nobleza obliga; algunos me han ofrecido hacer gratuitamente estos talleres, cosa que agradezco pero a la que me he negado, toda vez que la cordialidad y amabilidad de ese ofrecimiento me obliga y condicionaría mi juicio. A esas doce, les he vuelto a escribir en días pasados, proponiendo el mismo ejercicio intelectual que ahora propongo, más abajo. Tres personas me han respondido, y en el próximoartículo quiero articular sus opiniones con mis razonamientos. En ese caso, espero poder articular sus puntos de vista con aquellos que la publicación, hoy, masiva de este cuestionario, provoque. Si es que provoca algo. Porque, como a veces temo, en alguna medida la Espiritualidad de este siglo XXI es sólo una vuelta de tuerca a las creencias habituales, y no una evolución de las mismas, ocurrirá lo que desde tiempo inmemoriasl viene ocurriendo: cada uno, cada una, se abroquelará en lo que quiere creer sin comprender que ese «autismo espiritual» (del que escribí en el número anterior) no aporta nada en términos planetarios.
El punto es el siguiente. Tengo algunos interrogantes personales. No he realizado, aún, esta práctica (de hecho, me pregunto hasta qué punto aportaria algo el hacerlo, y me explico. Si realizo un entrenamiento con cualesquiera y luego tengo una opinión crítica, estaré primero obligado por mi compromiso con ese facilitador, y en segundo lugar, siempre se me podrá decir que «ése» no es «todos», no sé si me explico).
Aclaro, necesariamente, que por mi formación, experiencia y reflexiones estoy convencido de la existencia de los Registros. Mi enfoque investigativo apunta a la validez de las técnicas de apertura, y se basan en dos premisas que expondré a continuación, acudiendo ahora a ustedes, con la pretensión de molestarles para pedirles sus reflexiones sobre las mismas.
Todas ls citas, fuentes y opiniones respetaré y volcaré en mis conclusiones.
Aclarado el punto anterior (el de mi aceptación de los Registros) planteo estas dos premisas:
a) Lo que se llama Lectura de Registros, ¿cómo puede distinguirse de una simple, llana y sencilla clarividencia?. La «manifestación» de guías, Kumaras, ángeles, etc., ¿no puede ser una dramatización del inconsciente para hacer sensible en el plano de la conciencia la percepción extrasensorial?. ¿En qué se distingue la «vidente» que «ve» en su bola de cristal -en el mejor de los casos, clarividencia que emplea el objeto como «soporte»- y la info leída en la apertura de Registros, que puede usar la representación visual como «soporte»?. ¿Podemos suponer que hablar de Lectura de Registros Akhásicos es un recurso de «merchandising» para atraer nuevos interesados ya que la vieja y sencilla Parapsicologia clásica parece no tener el exotismo oriental?. ¿Cómo puede establecerse una distinción creíble entre Entrenamiento de Clarividencia y Lectura de Registros Akhásicos?
b) Si se presupone que en un fin de semana -o en un par de ellos- mediante módico (o no) arancelamiento pueden abrirse los Registros (evitaré alguna cruel ironía), ¿no deberíamos avisarles a tantos monjes tibetanos que siguen pasando frío y haciendo sacrificios durante años en el Himalaya que no vale la pena tanto esfuerzo, simplemente tomarse un avión, venir a Occidente y en unos días regresar con el mismo Conocimiento?. Contra argumento: es Tiempo de Cambios, pues los cambios cuánticos abren estas nuevas técnicas. Pero regreso al mismo punto. Si los tibetanos saben de esto (y vaya si deben saberlo: de allá vino el Conocimiento, no?) porqué siguen sosteniendo las viejas estrategias?
Quisiera dejar sentado que no es mi intención confrontar pero sí, intercambiar argumentos, experiencias, reflexiones, que provean un enriquecimiento en el camino del Conocimiento. Agradeceré, entonces todo aporte en ese sentido, en la esperanza que tal vez les interese un enriquecimiento de esta investigación.
(Continuará)